Otra arista a revisar
en un sistema basado en compartir los recursos trata acerca de la forma de vida
que debieran llevar, quienes luego de haber trabajado muchos años, necesitan un
sistema socioeconómico que los contenga, los incentive a vivir digna y felizmente.
Sé
que el artículo es algo extenso, por eso le pido al lector paciencia y que
intente pensar acerca de toda la correlación de variables, para que las
conclusiones sobre lo qué sucede y podría suceder con los sistemas de
protección de la ancianidad sean entendidas correctamente.
La llegada del Siglo
XXI ha dejado en el tintero varios puntos a analizar en relación al tema
planteado en el párrafo primero, de cómo se desenvolverán las sociedades y
gobiernos para con sus generaciones mayores. En relación a esto surgen algunas
variables que deberíamos analizar para tener en cuenta en la formulación de un
sistema social que contenga a nuestros seres mayores, como ser : (i) el aumento
de la esperanza de vida;
(ii) el aumento de la tecnología en relación a la
posibilidad de aumento de la esperanza de vida;
(iii) el aumento de la
tecnología como factor que otorga mejores condiciones de trabajo, pero al mismo
tiempo menor necesidad del factor humano;
(iv) el aumento natural de la
población;
(v) los actuales sistemas de previsión social o contención social
para las personas mayores que dejan la actividad laboral. Es seguro que existen
otras variables o temas a tener en cuenta, pero pretendí acotarlos por el
momento.
(i)
En relación al
aumento de la esperanza de vida: Independientemente, de los motivos, la
Organización Mundial de la Salud (OMS) presentó en mayo de 2014 en Ginebra,
estadísticas que revelaron que las personas ganaron una media de seis años
de vida desde 1990, al tiempo que el informe destaca que los países de bajos
ingresos hicieron importantes progresos y han conseguido aumentar la esperanza
de vida en nueve años.
La esperanza de vida sigue aumentando
en todo el mundo, llegó en promedio a 68 años para los hombres y a 73 años
para las mujeres, aunque se mantienen las disparidades ya que un niño nacido en
un país rico vivirá 16 años más que el nacido en una nación pobre, aunque el
informe destaca que los países de bajos ingresos hicieron importantes progresos
y han conseguido aumentar la esperanza de vida en nueve años.
La diferencia de la esperanza de vida
entre los países de altos y bajos ingresos varía por género: en los
primeros, las mujeres viven seis años más que los hombres y en los
segundos tres años más. Japón es el país donde hombres y mujeres viven más: 80
y 87, respectivamente.
El grupo de países situado por debajo
de Japón en esperanza de vida femenina lo conforman España, Suiza, Singapur e
Italia (85 años), mientras que en Francia, Australia, Corea del Sur, Luxemburgo
y Portugal viven un año menos.
La esperanza de vida más elevada para
los hombres es la de Islandia, con 81 años; mientras que en Suiza, Australia,
Israel, Singapur, Nueva Zelanda, Italia, Japón y Suecia es de 80 años.
Los países donde más subió la expectativa de vida
en ese período fueron Liberia (de 42 a 62 años), Etiopía (de 45 a 64), Maldivas
(de 58 a 77), Camboya (de 54 a 72), Timor Este (de 50 a 66) y Ruanda (de 48 a
65); sin embargo, uno de los principales motivos por los cuales aumentó la
esperanza de vida en estos países es porque se logró reducir bastante la
mortalidad infantil; factor que debería seguir incrementándose para lograr un
mundo mejor.
Para tener en consideración en el presente
artículo, hay que agregar que la esperanza de vida promedio en los años 30
rondaba menos de 40 años y fue a partir de la década del 70´ que llego a pasar
apenas los 60 años.
(ii)
Es indudable que en gran parte del S. XX y en lo que va
del S XXI, el aumento de la tecnología
ha permitido realizar grandes avances que provocaron el aumento promedio de la
esperanza de vida. Aunque podemos verlo como que la tecnología ha mejorado la
vida desde el nacimiento, mencionaremos lo relacionado con la mejora en
correlación con las personas de mayor edad: han mejorado las tecnologías
relacionadas con el diagnóstico de enfermedades, por lo que los tratamientos
comienzan antes; han mejorado los sistemas de atención primaria en gran parte
del mundo, por lo que enfermedades o problemas de salud simple que podían
tornarse en complejos han disminuido drásticamente; han mejorado las tecnologías
de acceso a la información, lo que le permite a los profesionales de la
medicina capacitarse más rápido; aunque se puede seguir mejorando y mucho, se
han mejorado los remedios, el problema de estos que también ha crecido su
consumo (lo que demuestra mayor necesidad y también mayor auge de los negocios
en un sector que no debería ser negociable); asimismo, ha mejorado la
concientización que tiene una parte de la humanidad, en parte gracias a la
tecnología de las comunicaciones, respecto de los cuidados que las personas
tienen que tener consigo mismas para llevar una vida más sana, referidos a
alimentación y cuidados del cuerpo físico; también debemos mencionar que las
mejoras en las tecnologías de transporte han permitido salvar muchas más vidas,
por ser estos cada vez más rápidos y eficientes. Cabe mencionar que no todas
son rosas y que en http://nuevaeconomiaycompartir.blogspot.com.ar/2015/04/analisis-del-sistema-de-salud-actual.html
he tocado los desafíos que enfrente el sistema de salud, dentro de un sistema
basado en compartir los recursos.
(iii) Respecto a las mejoras tecnológicas como factor de
influencia en la generación de desempleo, me remitiré, en general, a efectuar
citas extraídas de distintos informes de la Organización Mundial del Trabajo,
para luego efectuar una pequeña correlación que nos permita sacar algunas
breves conclusiones:
En un informe
emitido en el año 2012, la Organización Mundial del Trabajo (OIT) concluye que,
después de la crisis económica mundial, la tecnología es la primera causa del
aumento del desempleo en el mundo. El director de esta Organización, José
Manuel Salazar-Xirinachs sostiene que “Los robots, los ordenadores y la
automatización incrementan la productividad, pero reducen el potencial de crear
empleos del sector manufacturero”. Esto, según el experto, ha llevado a que
incluso naciones como Japón hayan registrado un descenso en el número de
empleos en este sector a causa de las innovaciones tecnológicas. La influencia
de la tecnología como factor de mayor productividad y de consecuente desempleo
se ha visto de manera creciente, y con mucha más fuerza en las últimas décadas.
Y aunque cada nuevo avance tecnológico ha tenido la capacidad de generar nuevos
empleos, las tendencias revelan que son muchos más los que se eliminan como
causa de estos.
El informe Perspectivas
Sociales y del Empleo en el Mundo 2015 (WESO, en inglés) muestra
que, en los países de los cuales se dispone de datos (que abarcan 84 por ciento
de la población activa del mundo), tres cuartas partes de los trabajadores
están empleados ya sea con contratos temporales o a corto plazo, en empleos
informales, como cuentapropistas o en empresas familiares sin aportes.
La desigualdad de
ingresos está aumentando o sigue siendo elevada en la mayoría de los países,
una tendencia que se está agravando con el incremento de la incidencia de las
formas de trabajo no permanentes, el crecimiento del desempleo y de la
inactividad. La brecha salarial entre trabajadores permanentes y no permanentes
ha aumentado a lo largo de la última década.
Diversos informes
de la O.I:T. dan cuenta que a pesar de los pasos positivos que se han dado
hacia la ampliación de la cobertura de pensiones, la protección social –como
las prestaciones de desempleo– sigue estando disponible principalmente para los
trabajadores regulares. Para los trabajadores por cuenta propia, hasta las
pensiones son exiguas: en 2013, sólo 16 por ciento de esta categoría de
trabajadores contribuían a un régimen de pensiones.
Con el fin de
suplir un poco este vacío y de evitar que muchas personas se vean en situación
de desempleo, muchos gobiernos y compañías alrededor del mundo han buscado, en
tiempo recientes, capacitar a los trabajadores en tecnología, con el fin de que
ellos puedan ocupar otros puestos en los que se requiera menos mano de obra y
más trabajo intelectual.
En esta página: http://www.ilo.org/global/research/global-reports/global-employment-trends/2014/WCMS_234000/lang--es/index.htm,
podemos ver que se exhibe lo siguiente:
- El
número de desempleados a nivel mundial aumentó en 5 millones en 2013 y
alcanzó los 202 millones, lo cual representa una tasa de desempleo mundial
de 6 por ciento.
- Unos
23 millones de trabajadores han abandonado el mercado laboral en 2013.
- Se
estima que el número de personas en búsqueda de trabajo aumentará en más
de 13 millones hasta el 2018.
- Unas
74,5 millones de personas entre 15 y 24 años están desempleadas. Esto
representa una tasa de desempleo juvenil de 13,1 por ciento.
- Alrededor
de 839 millones de trabajadores vivían con sus familias con menos de 2
dólares diarios en 2013.
- Unos
375 millones de trabajadores vivían con sus familias con menos de 1,25
dólares diarios en 2013.
Referido a la evolución de la tasa de desempleo,
podemos considerar lo siguiente: http://www.ilo.org/global/about-the-ilo/newsroom/news/WCMS_202333/lang--es/index.htm
Vemos que la OIT
sitúa el desempleo global en alrededor de 220 millones de personas para el año
2015, y la tasa de desempleo global entre 6 y 6,5%, aunque con una clara
tendencia al aumento.
El 10 de junio de
2008 en Ginebra la OIT efectuó la siguiente declaración “sobre la justicia
social para una globalización equitativa”: http://www.ilo.org/wcmsp5/groups/public/---dgreports/---cabinet/documents/genericdocument/wcms_371206.pdf
Al leer todo el
documento, no puedo dejar de asombrarme cómo no se hizo casi nada al respecto y
luego de escribir lo que la misma OIT publica más arriba.
Para arribar a las conclusiones, como dije antes
trataré de realizar ciertas inferencias; es evidente que El Empleo en el mundo
se encuentra en plena mutación desde podríamos decir comienzos de la década del
80 hasta la fecha: 1. Al influir la tecnología en la formación de empleo se
produce una ampliación en la necesidad de conocimiento necesaria para acceder a
ciertos puestos, esto produce (entre tantas) 2 consecuencias, la primera
relacionada con la brecha tecnológica e informativa que amplía las divisiones
sociales de aquellos que no pueden acceder a estudios adecuados; la segunda
relacionada con la menor posibilidad de inserción porque (aunque no en todos
los casos) a mayor tecnología menor cantidad de puestos. 2. Consecuencia de las
consecuencias citadas en “1” se encuentra también que quienes llegan al dominio
o acceso al capital lograrán mayores remuneraciones por herencia, vínculos
económicos, políticos, etc., ampliando más la brecha de clases. 3. A lo largo
de 3 o 4 décadas el surgimiento de más y diversos servicios ha paliado la
pérdida de empleo industrial o agropecuario. 4. También a lo largo de 3 o 4
décadas, de acuerdo a diversos informes de la OIT muchas personas se van
adaptando a tener empleos de menor calidad y a sobrevivir en la informalidad;
esta adaptación hace que la tasa global de desempleo aumente, pero más
suavemente. 5. La competencia entre países provoca que el costo laboral sea
tomando como una de las variables fundamentales a la hora de elegir un país donde
producir por parte de las multinacionales, eso provoca que cada 15 o 20 años se
produzcan migraciones masivas de capital hacia países con menores leyes
regulatorias del mercado laboral y previsional. 6. Otro ámbito a tener en
cuenta es el surgimiento en muchos países de los denominados subsidios o planes
para los desempleados del mercado formal, que muchas veces son tenidos en
cuenta en las estadísticas oficiales como personas con empleo. 7. La no
existencia de estadísticas claras en gran parte del mundo, muchos países de
África, varios de Asia y varios de América Latina y Central genera que no se
pueda saber a ciencia cierta cuál es la verdadera tasa global de desempleo.
(iv)
La población
mundial ha pasado de los casi 1000 millones en el año 1800 a más de 6000
millones en el año 2000,
y el 30
de octubre de 2011
se alcanzaron los 7000 millones, según estimaciones de la ONU (basadas en
estadísticas).
Según estimaciones de la ONU la población hacia
fines de 2015 estará entre 7350 y 7400 millones, con lo cual se sigue
produciendo un aumento de entre 350 y 400 millones en 4 años.
Según el Banco Muncial, en 1998, el 85% de la
población mundial --más de 4 de cada 5 personas-- vivía en países de ingreso
bajo y mediano; en el año 2015 esa proporción será de 6 de cada 7.
En enero de 2010
las Naciones Unidas publicaron el informe Envejecimiento
de la población 2009. En el contenido de este informe se destacan cuatro
conclusiones principales:
1.
El
envejecimiento de la población no
tiene precedentes, es un proceso sin parangón en la historia de de la
humanidad. La población envejece cuando aumenta la proporción de personas de la
tercera edad (es decir, los mayores de 60 años o más), se acompaña de
reducciones en la proporción de niños (personas menores de 15 años) y por la
disminución en la proporción de personas en edad de trabajar (15 a 59). A nivel
mundial, el número de personas de la tercera edad se espera que supere el
número de niños por primera vez en 2045. En las regiones más desarrolladas,
donde el envejecimiento de la población está muy avanzado, el número de niños
cayó por debajo de la de las personas de la tercera edad en 1998.
2.
El
envejecimiento de la población es generalizado, ya que afecta a casi
todos los países del mundo. El resultado del envejecimiento de la población,
principalmente por la reducción de la fecundidad, se ha convertido en
prácticamente universal. La desaceleración resultante en el crecimiento del
número de niños junto con el aumento constante del número de personas mayores
tiene una directa influencia en la justicia, tanto intergeneracional como
intrageneracional y la solidaridad, que son los cimientos de la sociedad.
3.
El
envejecimiento de la población es profundo y tiene importantes
consecuencias y repercusiones para todas las facetas de la vida humana. En el
ámbito económico, el envejecimiento de la población tendrá un impacto en el crecimiento
económico, el ahorro, la inversión, el consumo, los mercados de trabajo, las
pensiones, los impuestos
y las
transferencias intergeneracionales. En el ámbito social, el envejecimiento de
la población influye en la composición familiar y vital, la demanda de
vivienda, las tendencias de la migración, la epidemiología y la necesidad de
servicios de salud.4 En lo político,
el envejecimiento de la población puede alterar los patrones de voto y la
representación política.
4.
El
envejecimiento de la población es permanente. Desde 1950, la proporción
de personas mayores ha aumentado constantemente, pasando del 8% en 1950 al 11%
en 2009, y se espera que alcance el 22% en 2050. Mientras la mortalidad en la vejez siga
disminuyendo y la fertilidad siga siendo baja, la proporción de personas de la
tercera edad seguirá aumentando. Como ejemplo, podemos mencionar a Japón, en
2013 tenía el 25,1% de su población con más de 65 años, que eran 31,4 millones
de personas aproximadamente; o China, que cuenta con alrededor de 185 millones
de personas por encima de los 60 años, aproximadamente un 13,7 por ciento de la
población total.
5.
Porcentaje de la población por edades según países de
ingresos altos o bajos –año 1998-.
6 6.
Porcentaje de la población por edades según países de
ingresos altos o bajos –año 2025 estimado-.
7.
Cabe destacar que aún en los países de ingresos bajos,
yendo de los subdesarrollados, a los países en desarrollo, la tasa de
fertilidad continúa siendo superior a 2,1 (se refiere a hijos por mujer en edad
fértil), que es la tasa de reposición poblacional. Sin embargo, en la mayoría
de ellos al observar cómo es el crecimiento de la población por segmento
socioeconómico, vemos que los segmentos de menores ingresos conservan una media
alta de tasa de fertilidad, en general mayor a 3 y en algunos casos, mayor a 4.
Esto en el largo plazo por temas que hemos explicado en otras notas del blog
(por ejemplo en http://nuevaeconomiaycompartir.blogspot.com.ar/2013/07/planificacion-familiar-algunas.html)
genera que la sociedad se divida aún más en lo concerniente a la distribución
de la renta.
(v) Actuales
sistemas de previsión social y sostenimiento de la ancianidad: haciendo un
pequeño repaso por la historia, los sistemas previsionales para el
sostenimiento de la ancianidad comenzaron a nacer en Europa por la década del
30, con el surgir del denominado Estado de Bienestar y fueron desarrollándose
por el mundo con distintas características. Existen sistemas plenos de aporte
al Estado y en donde el Estado pasada cierta edad y cumplidos ciertos
requisitos devuelve mensualidades a quienes se retiran de la vida laboral
activa; existen sistemas de aportes a entes privados que suplen el rol del
Estado; existen sistemas mixtos y también en muchos países (más que nada
subdesarrollados o en desarrollos) la previsión social no está desarrollada. A
su vez, como complemento debemos mencionar también la existencia de los
sistemas de salud, porque el consumo de productos y servicios del rubro aumenta
y son cada vez necesarios a medida que se envejece, tema que fue tratado en http://nuevaeconomiaycompartir.blogspot.com/2015/04/analisis-del-sistema-de-salud-actual.html
.
En base a lo
expuesto comenzaré a realizar una serie de deducciones e inducciones acerca de
qué está sucediendo y por qué debe ser repensado todo el sistema para el
sostenimiento, protección y cuidado de las personas que entran en la
ancianidad.
1- Los
sistema de previsión social fueron diseñados en su origen cuando un % menor de
la población superaba los 60 o 65 años, pudiéndolos ubicar temporalmente entre
1930 y 1960. Esto, desde el punto de vista del financiamiento, generaba que con
aportes menores se pudiera proveer de un correcto sostenimiento a las personas
mayores, luego de que estas se habían retirado de su vida laboral activa.
2- Con
el correr de las décadas fue aumentando la expectativa de vida; porque
mejoraron los tratamientos médicos, mejoraron los remedios, mejoraron los
sistemas de diagnóstico; y también en muchos casos mejoró la alimentación de
personas mayores y la forma de cuidar su físico. Esto se verifica aún más en
los países desarrollados, pero también se ha producido en los países en
desarrollo y subdesarrollados.
3- Sí
bien se verifica que la población continúa creciendo, se dan algunas
situaciones para destacar, en los países desarrollados crece muy poco y en
algunos el crecimiento es nulo, en los países en desarrollo crece la población
pero se verifica que la tasa de natalidad (dato extraído de otro artículo) se
mantiene en los estratos sociales más bajos y disminuye en los estratos más
altos. Todo esto, en el largo plazo contribuye a que existe mayor dispersión en
la distribución regresiva del ingreso; esto provoca que también en muchos
países se necesite más del aporte del Estado, tanto para personas mayores
retiradas como para personas menores de edad.
4- Debido
a las sucesivas crisis económicas por la que atraviesa el mundo actualmente, en
muchos casos se ha comenzado a cuestionar los sistemas de mantenimiento y
previsión social para la ancianidad, se los señala como que son “caros”, que no
permiten a algunos países ser más “competitivos”; en muchos se busca elevar la
edad jubilatoria o de retiro, pero al mismo tiempo vemos crecer el desempleo en
jóvenes o el empleo informal. Por el ángulo que lo veamos, observamos como el
sistema se tiende a degradar en cuanto a que se vislumbra que empeoren las
condiciones en que vivan los ancianos.
5- La
tecnología creciente, dentro del sistema actual de economía de mercado es un
mecanismo de doble juego (bienestar-malestar) para la sociedad. En muchos casos
amplía la brecha de acceso por la división económica; en otros genera la pérdida
de empleos (más aún, si pensamos que el mundo podría estar en un futuro en gran
parte robotizado; que sería lo lógico y conveniente sí encontrásemos un sistema
que nos contenga y nos permita una vida feliz a todos); genera concentración de
actividades porque muchas empresas tecnológicas en crecimiento comienzan a
tener actividades en otras áreas que no son de tecnología propiamente dichas.
Aunque sí es cierto que, con la tecnología creciente se van generando nuevas
oportunidades en ciertos rubros. No obstante, la estimación de varios expertos
coincide que el desplazamiento negativo de empleo es mayor que la generación
del mismo.
6- Más
allá de la tecnología, la tasa de desempleo global sólo aumento levemente, pero
tiene en su contra que: (i) hubo gran desplazamiento del empleo formal hacia el
informal; (ii) hubo desplazamiento de empleo de calidad hacia empleos de baja
calidad; (iii) no existen estadísticas confiables en varios lugares del mundo,
y en algunos casos se mezcla empleo con planes de asistencia estatal. En
definitiva, una de las consecuencias de estos cambios es que se produce un desfinanciamiento
de los sistemas de previsión social.
7- Muchos
Estados Nacionales han reaccionado ante este escenario generando las medidas
para debilitar el futuro de la ancianidad, se recorta el gasto en pensiones y
jubilaciones, se disminuyen los aportes al sistema, etc.; ya que todos los
gobiernos siguen pensando en un sistema de competencia mundial y no de
cooperación; se inventan nuevas formas y sofisticadas de ver el tema, que son
en muchos casos soluciones temporarias. Esto evidencia, la ceguera con la que
los líderes mundiales se manejan ante las “fuerzas del mercado”.
Con relación a lo
expuesto en los puntos anteriores, a los cuales, el lector podría imaginar
varios más, ya que, pretendieron sólo esbozar el escenario futuro sustentado en
lo escrito anteriormente y en lo que se ha venido exponiendo en distintas notas
del blog; intentaré generar unas breves conclusiones para finalizar con una
propuesta (seguramente puede haber muchas otras) de cómo encarar en un futuro
sistema basado en compartir los recursos la previsión social, de salud,
alimenticia, etc. de las personas que dejan su vida laboral activa.
1. Es
necesario entender, que más allá de sí una persona trabajó poco, mucho o nada,
o sí aportó, ahorró o no lo hizo, en un mundo que evoluciona de manera
permanente es necesario asegurar modos de vida y del cuidado de la salud (fijando
cierto estándar mínimo) para aquellos que entran en la edad que su cuerpo no
tiene el vigor para ser tan productivo. Para esto, en primer término hay que
saber, que en el mundo están dadas las condiciones para construir un sistema
inclusivo y basado en compartir los recursos, pero hay que superar un gran
rezago de la condición humana actual, basado en prejuicios de egoísmo y mala
predisposición para cambiar el orden actual y varios de los modos de vida
actuales.
2. Hace un tiempo escribí 3 artículos en donde trato de
esbozar ideas acerca : http://nuevaeconomiaycompartir.blogspot.com.ar/2014/09/compartir-la-politica-economica-del.html como la política económica inicial (me refiero a
que en 20 o 30 años surgirá por completo la política de compartir, mientras
tanto nos iremos adaptando como sociedad mundial) general a seguir para
comenzar a compartir los recursos.
http://nuevaeconomiaycompartir.blogspot.com/2013/05/el-cambio-mundial-y-el-pbi-mundial-como.html; como la puesta en marcha de una serie de acuerdos
internacionales para que la competencia se genere dentro de un marco de mayor
equidad.
http://nuevaeconomiaycompartir.blogspot.com.ar/2013/12/hacia-un-nuevo-sistema-politico.html; como las condiciones de los sistemas de gobierno
esperables para que se genere el marco social en donde puedan cumplirse los
anteriores puntos.
3. Dentro
un sistema global basado en compartir los recursos tendríamos que estudiar 2
modos de ver un sistema de previsión, un método que es el tradicional, en donde
existe un aporte dinerario para la mantención (o de los trabajadores o de los
propios que ahorran para su retiro) y un segundo método basado íntegramente en
compartir los recursos.
4. Acerca
del primer método podemos explayarnos en pensar lo siguiente respecto del
aporte privado e individual para el retiro. En un sistema que tienda a
compartir los recursos, también se deberán hacer cambios en el sistema
financiero global (http://nuevaeconomiaycompartir.blogspot.com.ar/2014/10/cambios-en-el-sistema-financiero.html),
lo que supone que el gran movimiento de capitales y especulación disminuirá.
Esto, de alguna manera, impactará en lo que se denominan fondos de pensión
privados, por lo tanto sólo se podría realizar en caso de que exista un sistema
mixto, canalizar ahorros para el retiro, pero también para el aporte al fondo
global. Es casi obvio, que esto así suceda, porque estamos hablando de
“compartir” los recursos.
5. Acerca
del segundo método, lo que tradicionalmente se conoce como sistema de reparto,
es sobre esto que habrá que realizar las mayores modificaciones, las cuales
podemos poner de ejemplo: (i) determinar la carga tributaria sobre los
trabajadores activos potencial de cada país que genere el equivalente a un
gasto social holgado para las personas en situación de retiro; (ii) generar
acuerdos internacionales para que paulatinamente la carga tributaria se vaya
equiparando en cada país; (iii) estudiar el crecimiento demográfico de forma de
determinar cuáles países tienen mayor % de personas ancianas y están encima de
la media en la carga tributaria necesaria; (iv) generar un fondo de
compensación internacional, en donde los que tienen menor gasto aporten a los que
tienen mayor gasto en previsión social (recordemos también que en varias
ocasiones he hablado de políticas de planificación familiar, por lo que la tasa
de natalidad y las pirámides poblacionales deberían ir equilibrándose en el
largo plazo); (v) ver la posibilidad de que ese fondo compensador se utilice
para el desarrollo de otras áreas que no tengan que ver con la previsión social
(en general los países que más recauden serán los menos desarrollados, ya que
al equiparar tasas de carga tributaria, tienen mayor % de población activa y
menor cantidad de ancianos, pero a su vez necesitan más inversiones para
desarrollarse) –suponiendo también que habrá que ir equilibrando los sistemas
de valor agregado en cada producción global de cada país- (vi) como opción se
pueden también estudiar la posibilidad de ofrecer el retiro en países no
desarrollados, en donde el país que envía sus personas mayores, abona una
suerte de canon (tema que debería desarrollarse mucho más que estas pocas
palabras en otro texto); (vi) Así como en la nota: http://nuevaeconomiaycompartir.blogspot.com.ar/2014/04/consejo-mundial-para-el-desarrollo-y-la.html propuse un fondo especial para el desarrollo,
también a nivel internacional, se podrían generar planes globales que permitan
a cada país desarrollar la infraestructura de salud necesaria para atender
correctamente a todos las personas en situación de retiro.
6. Al
cambiar totalmente la visión, y entrar de lleno en un sistema basado en
compartir, el paradigma sobre el cual se efectuaría el sistema de previsión y
protección de las personas retiradas de la actividad laboral sería
completamente distinto al que se utiliza actualmente. Podríamos llegar a
denominarlo un mundo ideal, en donde los mayores tengan todas sus necesidades
cubiertas, en cuanto a alimentación, salud, vivienda, servicios de
telecomunicaciones, ocio, vacaciones, etc. En este mundo ideal, aceptamos
completamente que cuando alguien se retira, se retira con una gran parte de
privilegios que puede dar la vida (todo para ellos sería “gratis”), aunque
haciendo algunas concesiones de sus bienes para que los mismos continúen siendo
usufructuados correctamente por las generaciones más jóvenes. Para llegar esto,
toda la humanidad necesita trabajar mucho, terminar con el hambre, dar vivienda
digna a una gran parte excluida del sistema actual, mejorar los sistemas de
salud, los sistemas financieros, políticos, etc. Hoy estamos lejos, pero el
principio de ese sendero a construir está cada vez más cerca.
La naturaleza
humana en general evoluciona muy lentamente, y cada algunos miles de año Dios o
lo que queramos entender por El, nos da un sacudón, un empujón. En la nueva
era, con la aparición de Maestros de Sabiduría en la vida pública del planeta,
los prejuicios basados en el egoísmo, mala disposición para renunciar al orden
establecido de las cosas en favor de nuevos modos de vida y de pensamiento, el
orgullo, la obstinada resistencia a la Verdad y las ligaduras que envuelven el
gran potencial de la humanidad, cederán. La innovación constante, el estar
seguro de una buena y nueva concepción para la humanidad, la cooperación y un
gran clima evolutivo rodeado de la bienaventuranza finalmente se impondrán.
Esto conllevará no sólo el bien de nuestros mayores, sino de la sociedad en su
conjunto.