Sí
tuviéramos que efectuar una definición de qué es lo que la mayor parte de las
personas adultas desean qué diríamos: salud, amor-felicidad, trabajo, paz para
la familia y el pueblo; quizás podamos agregar un buen futuro para los hijos,
disfrutar de cierto tiempo libre, disfrutar de alguna vacación y en definitiva
todos tienen en mente la idea de progresar. Quizás hemos simplificado mucho la
tabla de deseos, pero de manera sencilla y poco menos de 3 renglones hemos
definido lo que todos o la gran mayoría del mundo desea o deseamos. Sin
embargo, para que cada ser humano adulto intente plasmar en su vida diaria
estas necesidades o deseos tiene que existir un factor que sea la fuente para
obtener esos objetivos. Sin lugar a duda, el mayor factor existente en la
sociedad moderna para ello es el trabajo.
En este
artículo del blog trataré de analizar distintas opiniones, tendencia e
información relacionada con la evolución de la tasa de desempleo, el empleo, la
tecnología y las formas en que ha ido mutando el trabajo para las personas.
Lo que
debo recalcar al lector es que aunque trate de ser imparcial, me he encontrado
con muchos datos incompletos, faltas de tendencias oficiales de largo plazo,
falta de cruce de datos y conclusiones algo inconclusas de organismos oficiales
nacionales e internacionales de largo plazo y por ello, en algunos casos he
optado por colocar información no oficial para intentar generar análisis de
tendencias a largo plazo. Con esto quiero sugerir, que antes de escribir, este
como otros artículos del blog, leo una importante cantidad de artículos, notas
o incluso libros, para intentar generar un análisis que incluya múltiples
variables que puedan concluir en una tendencia razonable escribir cada palabra.
Lo que
denominados globalización comienza a irrumpir abiertamente en el mundo hacia
fines de los años 70 y principios de los 80, en la década del 90 comienza a
tomar velocidad y la competencia, la posibilidad de intercambiar bienes y
servicios entre casi todos los países del mundo se impone en gran parte de los
países del mundo. Durante la primera década del S XXI se consolida como sistema
de intercambio y a medida que avanza la tecnología y la globalización en el
ámbito de los servicios, en el mundo se aceleran los procesos, métodos y
sistemas que permiten conocer, adquirir y vender productos y servicios de un
país hacia otro. A la crisis comenzada en con el mercado de hipotecas subprime
en EE.UU. la podríamos denominar como la primer Crisis de Cuestionamiento del
Modelo Global, esto es porque efectos financieros, repercutieron en muchos
segmentos productivos alejados del mercado financiero mundial, pero más que
nada porque fue una crisis que provocó que en muchos países comenzaran a surgir
ideas relacionadas con (i) la importancia y revalorización de la producción
nacional; (ii) en el ala política comenzaron a surgir o a tomar mayor impulso
movimientos y partidos políticos ultranacionalistas, con signos antimercado,
con signos de separatividad o secesión; (ii) mayor necesidad de generación de
alianzas o firmas de tratados para establecer el libre comercio, pero al mismo
tiempo ciertas condiciones de cooperación y de competencia, esto en respuesta a
la competencia mundial falta de reglas de la que he hablado en varios artículos
del blog y de la que tanto falta acordar; (iv) establecimiento a nivel mundial
de ciertos parámetros más firmes para la actividad financiera como ser los
distintos tratados de Basilea, a lo cual repito también falta mucho por
modificar (http://nuevaeconomiaycompartir.blogspot.com.ar/2015/12/la-energia-del-dinero-o-mejor-decir-el.html;
http://nuevaeconomiaycompartir.blogspot.com.ar/2014/10/cambios-en-el-sistema-financiero.html);
(v) la toma de conciencia de gran parte de la humanidad acerca de que la
actividad productiva del hombre daña al planeta en términos ecológicos.
“Hasta aquí nada he dicho del
empleo, el desempleo o la tecnología, pero quería introducir un pequeño marco
para estos temas”.
A lo
largo de 4 décadas han mutado notablemente las formas de empleo, y lo mismo ha
sucedido con las formas en que el empleo es medido, y además no se encuentran
demasiadas estadísticas que muestren la evolución en el largo plazo. Esto ha
desvirtuado notablemente los análisis que puedan efectuarse para determinar sí
la calidad del empleo se ha mantenido a lo largo del tiempo, aunque puede
considerarse lo siguiente:
a.
La
tasa de desempleo global medida por la OIT (Organización Internacional del
Trabajo o ILO en inglés) parece no haber sufrido demasiados cambios a lo largo
de 25 años, desde 5% en 1990 hasta 6.6% en 2014.
b.
Las
mejoras en cuanto a la cantidad de gente empleada en China e India en los
últimos 20 años influye en un alto grado para que esa tasa no haya subido más.
c.
En
una gran cantidad de países, que incluyen a los países en desarrollo parte de
la generación de nuevo empleo se ha generado a través de lo que se denominan
empleos informales.
d.
En
los países desarrollados ha crecido también el empleo informal, pero también se
verifica que parte de las personas empleadas lo hacen trabajando menos horas
que las que desearían y por menor salario.
e.
En
los países subdesarrollados el crecimiento del empleo ha llegado de la mano de
mayores jornadas laborales.
Crecimiento
del sector servicios: para hablar de
este tema, tendremos que hacer una pequeña clasificación en países de ingreso
bajo o subdesarrollados en donde el sector servicios es menor al 35%, y el
resto del PBI se lo reparten entre sector primario e industria con
preponderancia del primario; en los países en desarrollo o ingreso medio los
servicios llegan al 50% o poco más y en el otro 50% la industria ocupa más que
las actividades primarias; y en los desarrollados o ingreso alto el sector
servicios es mayor al 60% y en el 40% restante hay una gran parte de industria.
Obvio que puede haber excepciones con uno o más países. A efectos de
simplificar, a medida que las economías y sociedades se desarrollan el sector
servicio pasa a tener mayor preponderancia y a ser el creador de empleo en
detrimento de los otros sectores.
Analizando
el informe de la OIT –ILO en inglés- ( http://www.ilo.org/global/about-the-ilo/newsroom/news/WCMS_339146/lang--es/index.htm) observamo: (i) la transición de
primario-manofactura hacia servicios implican cambios en las aptitudes
solicitadas a las personas; (ii) las tareas de automatización que en primer
lugar desplazaron a la empleos en la industria año a año llegan más al sector
servicios, con la consiguiente reducción de los empleos en estos sectores;
(iii) tendencia al desplazamiento por automatización de cualificación media con
la consiguiente ampliación de la brecha de conocimiento requerido y polarización
de los ingresos, lo que implica también peor distribución del ingreso; (iv)
crecimiento de sector servicios en países en desarrollo o desarrollados en
donde el empleo que crece es aquel con baja retribución o menor cantidad de
horas trabajadas que las necesarias para vivir dignamente; (v) crecimiento de
informalidad en los servicios en los países en desarrollo como forma de
adaptación de las personas a la nueva situación.
Cambios
en la tecnología, en función de cómo analizamos el desarrollo tecnológico de la
humanidad podríamos establecer una serie de hitos para determinar cómo ha ido
evolucionando la tecnología –cada uno podrá efectuar su propio resumen-: (i)
revolución industrial; (ii) los comienzos de la fabricación masiva de bienes a
principios de siglo; (iii) los avances producidos luego de la segunda guerra
mundial y el crecimiento que se dio en las sociedades de consumo; (iv) la
llegada de los primeros ordenadores; (v) el crecimiento de las comunicaciones
que comenzó en la década del 70; (vi) el surgimiento de Internet en los 90;
(vii) la nanotecnología en los 90 y 2000; (viii) la robotización que ha venido
mejorando y ampliando sus esferas de acción a lo largo de 40 años; (ix) la
creación de maquinarias cada vez más grande y con mayor grado de tecnología;
(x) las redes sociales con su explosión a partir del 2010; (xi) el acceso de
muchos servicios en la llamada “nube” en los últimos años; (xii) las
impresiones 3D que en pocos años simplificarán muchos procesos de producción
con el consiguiente impacto en el empleo que hoy se nota muy tenuemente; (xiii)
y el más adelantado y quizás perturbador elemento para el empleo es el
surgimiento de la inteligencia artificial, es decir máquinas con la capacidad
de pensar y tomar decisiones.
Durante
cada hito y a medida que el mundo iba adaptándose a las nuevas tecnologías entraban
en cada aspecto de la vida y al mismo tiempo iban creando nuevos servicios,
nuevos bienes y por lo tanto nuevas necesidades. Esto es cierto y ha sido así,
con lo cual el desplazamiento producido por las máquinas o mejores tecnologías,
generaba en el mediano y largo plazo adaptaciones y surgimiento de servicios
que reemplazaban el empleo perdido por uno nuevo. Sin embargo, varios
especialistas han comenzado a advertir que esta tendencia de sustitución de
tipos de empleo ha terminado y peor aún, el desplazamiento neto de empleo hacia
desempleo continuará. A efectos de fijar una fecha precisa, podríamos mencionar
que principios del S. XXI ha sido el punto de quiebre en esta tendencia
sustitutiva. La robotización, la llegada de la nube y las impresiones
tridemensionales van en aumento y no se detendrán, quienes posean el poder
sobre estos aspectos, aunque este esparcido en muchas empresas, se convertirán
en gestores del futuro y del empleo de gran parte de la humanidad, con la
responsabilidad que ello implica.
Quisiera
destacar 2 artículos leídos a efectos de ilustrar el punto. El primero, ¿Qué trabajos nos quitarán los robots? de Derek Thompson en The Atlantic, está basado en un estudio de Carl Benedikt y Michael Osborne de la Universidad
de Oxford que vaticina que, en 10 o 20 años, casi la mitad de los empleos en
Estados Unidos estarán en manos de robots. Benedikt y Osborne anticipan que la
ola de progreso robótico terminará de desplazar al empleo humano en las mismas
áreas donde ya lo hace. Para ser exactos, los sectores más vulnerables a los
robots según el estudio son: apoyo administrativo y de oficina, ventas y
comercio, servicios, producción, transporte y ciertos trabajos gerenciales.
Algunos menos vulnerables que eventualmente estarán en riesgo son: artes y
entretenimiento, educación, trabajo comunitario, negocios, finanzas, salud, e
ingenierías y ciencias.
El segundo artículo, La revolución digital que no fue de Jeff Madrick, advierte que, aunque
todas las revoluciones tecnológicas de la historia hayan eliminado empleos sólo
momentáneamente, en esta ocasión no será así. En esta revolución, asegura
Madrick, la eliminación de empleos será definitiva. Basa su análisis en que las
revoluciones tecnológicas anteriores –principalmente la primera y segunda
revoluciones industriales– no sólo no tardaron tanto en volver a generar
empleos, sino que por naturaleza requerían más mano de obra. “En 1955, General
Motors empleaba a casi 600 mil personas –actualmente, cuando produce más autos
que nunca antes GM emplea alrededor de 202.000 personas en el mundo-. Hoy, en
una economía mucho más grande, Google apenas emplea a 50 mil, e-bay a 20 mil y
Facebook tan sólo a 6 mil. Apple, Microsoft y Amazon juntas difícilmente llegan
a 100 mil empleados a nivel global, nada que ver con los años gloriosos de Ford
y General Electric”. Y es que, según Madrick, los empleos que la revolución
digital requiere son mínimos. “El desarrollo del iPod,” por ejemplo, “a penas
generó 14 mil empleos en EU.”. Cabe aclarar que el fenómeno y ascenso del
iPhone ha permitido crear, según datos de Apple, cerca de 290.000 puestos de
trabajo desde 2007, empleos relacionados con el desarrollo de las aplicaciones;
aunque cabría preguntarse sí esta contabilización de números se trata de
puestos nuevos o de adaptaciones –es decir personal que ya trabajaban con la
tecnología e incorporaron mayores conocimientos para trabajar sobre el iPhone. Madrick,
basándose en un reporte de McKinsey & Co., menciona que la evaporación de
empleos comenzó más o menos a partir del cambio de siglo. Desde entonces, según
esa consultora, se han perdido casi 5 millones de empleos. Estas y otras
inconsistencias han llevado a varios economistas, como Robert Gordon de la
Universidad Northwestern, a pensar que “la reciente ola tecnológica simplemente
no es comparable a las anteriores en términos de potencial productivo”. De
manera que, “el gran progreso de los últimos 250 años”, cita Madrick a
Gordon, “bien podría ser un episodio irrepetible en la historia humana.”
Bajo esta misma línea, un análisis de Associated Press, que recoge The Washington Post, tomando datos de 20 países, muestra que millones de
empleos de cualificación y retribución media han desaparecido en los últimos
cinco años, empleos que, por otro lado, constituyen la columna vertebral de la
clase media en los países desarrollados. Esto no significa que esas personas
están desempleadas, aunque muchos quizás lo estén, sino que su empleo mutó o
desapareció, con lo cual esa persona tuvo que tomar otro modo de vida.
Reacción
colateral al empleo: este punto lo denominé así, puesto que en mi opinión nunca
deberían haber existido este “tipo de empleos”.
Debido a cómo ha ido evolucionando la tecnología y el empleo, en el
mundo tenemos un desarrollo caótico de formas de empleo, que en un mundo
“evolucionado” y en donde se aprenda a compartir los recursos no debieran
existir tales empleos o al menos la cantidad de los mismos debiera ser
drásticamente menor.
El
primero de estos tipos de empleos colaterales tiene que ver con el tema
seguridad o inseguridad. Aquí podemos distinguir 2 aspectos, el crecimiento de
“empleos”, sí es que puede denominarse de esta forma, relacionados con temas
ilegales. Una de las reacciones a la falta de esperanzas en millones de hogares
es que ha crecido (en % respecto a épocas anteriores) enormemente la cantidad
de personas vinculadas a actividades ilícitas, quienes de alguna manera,
consideran lo que hacen como un trabajo. Sobre esa misma arista, podríamos
decir que también ha crecido enormemente la cantidad de personas que trabajan
en actividades vinculadas a los aspectos “legales” de la seguridad/inseguridad,
y ello atañe a empleos relacionados con sectores como policía, seguridad carcelaria,
seguridad privada, seguridad de transporte de mercadería y dinero, seguros
sobre bienes, seguridad informática, estudios legales con especialización penal.
Con esto no significa que estos empleos no deban existir, sino que en una
sociedad que permita un mejor desarrollo de todos sus habitantes, este tipo de
empleos sería de menor cuantía.
El
segundo aspecto de la reacción colateral lo podríamos denominar “la fuerza de
los gremios o sindicatos de trabajadores”, con esta oración quiero expresar que
en varios sectores laborales, ciertos gremios o uniones sindicales fijan la
cantidad mínima de empleados por sector, lo que en varias oportunidades atenta
contra la eficiencia del trabajo en sí mismo. Para mencionar algunos ejemplos,
aunque no puedan clasificarse como concluyentes, diríamos que gran parte de lo
relacionado con transporte de documentación física debiera tender a
desaparecer; gran parte de los empleados (ya se hace en los países
desarrollados) que atienden cabinas de peajes deberían desaparecer en el futuro;
ciertos puestos relacionados con la atención de “cajas” deberían eliminarse en
un sistema basado en compartir y guiado por mayor tecnología. Sí vemos esto
desde el punto de vista del trabajador, la presencia y actuación del gremio es
efectivamente una protección y da seguridad, pero al verlo desde el punto de
vista de un sistema en evolución entendemos que la tecnología puede reemplazar
dicho puesto de trabajo y agilizar la forma en que dicho trabajo se realiza. Al
verlo como un sistema basado en compartir los recursos, que haya más trabajadores
en ciertos puestos es una forma de compartir; pero al verlo desde el punto de
vista buscar un potencial al sistema nos daremos cuenta que el mundo podría ser
mucho más fácil sí aceptásemos la tecnología; aunque esto no puede ser
realizado sin aceptar primero la creación de una nueva sociedad basada en
compartir los recursos.
Sólo a
modo de mención, ya que fue tratado en http://nuevaeconomiaycompartir.blogspot.com.ar/2015/08/sistemas-de-proteccion-de-las-personas.html me referiré a la dicotomía
existente en muchos de los sistemas de previsión social o protección contra la
ancianidad. Como la edad en que una persona se jubila o recibe una pensión es
un parámetro de recambio generacional y laboral, y dicha edad está pensada en
función de una cantidad de años futuros en los cuales esa persona vivirá de su
jubilación o pensión. Hoy atendemos a un mundo en el cual se ha elevado la
expectativa de vida, con lo cual la reacción de la mayor parte de los gobiernos
es elevar la edad jubilatoria. Si bien en algunos casos es correcto, debido a
que muchas ocupaciones tenían bajas edades de retiro, en muchos casos esto
conspira contra la renovación de puestos de trabajo. Una de las consecuencias
de esto es el aumento en el desempleo juvenil, debido a que son éstos quienes
quedan relegados del recambio generacional. Sí bien este es una análisis muy
simplista, esta podría ser una de las causas del mayor desempleo juvenil.
El
desempleo en los jóvenes. Enlazando con el punto anterior, demos un pequeño
repaso a acerca de las tasas de desempleo en los jóvenes. De acuerdo a datos de la OIT (Organización
Internacional del Trabajo) la
tasa mundial de desempleo juvenil se estancó en 2012 y no se espera que
disminuya hasta al menos 2016, sostenía la OIT en su informe Tendencias Mundiales del
Empleo Juvenil 2012 (www.ilo.org/getyouth).
Mientras que la tasa
global de desempleo está alrededor de 6.5% de la población, en los jóvenes se
estima entre 12.5 y 13.5%, más del doble que la total. Entre 2007 y 2012 se
estimó que hubo un aumento de 4 millones de jóvenes desempleados. En el mismo
informe se mencionaba: “La tasa
de desempleo experimentará una presión adicional cuando los jóvenes que
prolongan su permanencia en el sistema educativo debido a la falta de
oportunidades finalmente entren en el mercado laboral. La crisis del desempleo
juvenil puede ser superada, pero sólo si la creación de empleo para los jóvenes
se convierte en una prioridad esencial en la toma de decisiones políticas y si
se intensifican las inversiones del sector privado de manera significativa.
Esto comprende medidas que ofrezcan facilidades fiscales y otros incentivos a
las empresas que contraten jóvenes; esfuerzos para reducir la falta de
congruencia entre las competencias de los jóvenes; programas de capacitación
empresarial que integren la formación profesional, la orientación y el acceso
al capital; y la mejora de la protección social destinada a los jóvenes.
Declaró José Manuel Salazar-Xirinachs –Director Ejecutivo de la OIT”. http://blue.lim.ilo.org/index.php?option=com_content&view=article&id=2508
Como
vemos en ningún momento se mencionan falencias del sistema global como las que
se tratan de abordar aquí, siempre se supone facilidades fiscales (cabría
preguntarse qué pasa sí todos los países lo harían al mismo tiempo, se
perderían los incentivos de competitividad??). Sí es cierto que la capacitación
y la formación educativa de los jóvenes deben ser tomadas en cuenta en cada
plan de gobierno a todo nivel. Pero ver el tema del desempleo sólo como una
cuestión de productividad o costo es en parte el gran problema de la humanidad.
Además de necesitarse soluciones creativas, sí o sí el sistema global necesita
que se compartan los recursos, financieros, productivos, de las actividades
primarias, de las actividades industriales, de los servicios. El mundo necesita
cambios a gran escala, no sólo modificaciones fiscales y capacitación.
Conclusiones: Quise en este apartado
exponer una serie de conclusiones para no aburrir al lector, y exponer algunos
anexos con gráficos para el final.
Desde 40
años a la fecha, podríamos decir con la irrupción de la competitividad mundial
paulatina en cada país ha llevado a cada economía a adaptarse al gran mercado
mundial. Uno de los aspectos que fue tocado por esta competitividad fue el
factor empleo, en sus 3 variantes de costo, calidad y cantidad. El acceso
simultáneo del capital a más y mejores tecnologías también jugó un papel
preponderante en la adaptación de quienes deciden sobre un empleo.
Quisiera
distinguir en mi opinión entre competitividad y globalización. El mundo
actualmente sufre una crisis de competitividad derivada del afán del hombre de
tratar como un mercado diferentes aspectos de la vida, desde la salud, la
alimentación básica, el cuidado de las personas mayores, el cuidado del
planeta, la generación de energía en ciertos modos y otros aspectos. En otra
arista de esta competitividad esta la forma en que los capitales financieros y
productivos eligen producir ciertos bienes y servicios más baratos
fundamentando su decisión en un más bajo costo de mano de obra y menor protección
de leyes sociales hacia los trabajadores. En tanto que globalización, entiendo
yo, es un característica positiva del planeta que permite el intercambio de
bienes y servicios producidos en distintos lugares del mundo en beneficio de
todos; pero repito, debiendo que
delimitar la acción de influencia de la comercialización o competitividad.
En
general no hay buenos estudios o análisis de organismos internacionales acerca
de sí la mutación que ha sufrido el empleo es buena o mala, sino que los
análisis son más bien cuantitativos. Respecto de esto, sólo podemos afirmar que
se menciona la tasa de desempleo global en 2015 cercana a 6.6% de la población,
existiendo muchos países (en general en desarrollo y subdesarrollados) de los
cuales sus datos no son precisos. Asimismo, no existe una metodología
internacionalmente aceptada para medir los diferentes tipos de empleo y esto es
un ítem en lo que la ONU debería trabajar. Ejemplos; no debiera ser lo mismo
trabajo a tiempo parcial que trabajo a tiempo completo; no debiera ser
considerado empleado aquel que cobra un beneficio del estado o de una
organización privada en donde ese beneficio se considere como asistencia
social; no debiera ser lo mismo aquel que trabaja bajo cierta legislación
laboral que aquel que trabaja en la ilegalidad; no debiera ser lo mismo aquel
que trabaja en la ancianidad por necesidades económicas que aquel que lo hace
por placer o para sentirse activo; lo mismo respecto a la consideración de
niños como trabajadores cuando lo hacen por necesidad o por ayudar
económicamente a su familia. Entonces, la OIT debería bajar metodologías
precisas a cada centro de estadísticas nacional a efecto de considerar en las
mediciones de empleo/desempleo las distintas variantes, luego de haber llegado
a un acuerdo mayor entre los países, pero en función de la “creación de
correctas relaciones humanas”.
Uno de
los aspectos fundamentales con que se mide el empleo es el grado de formalidad
o informalidad (a la cual debería decirse cumple o no con todas las leyes laborales
dicho puesto de trabajo), y según diversos estudios (como el publicado en forma
conjunta por la OIT y la Organización Mundial del Comercio en 2009) muestran
que a lo largo de 3 décadas ha sido muy difícil disminuir la informalidad. Yo
quisiera agregar que si bien en porcentaje se ha mantenido en niveles similares
según se muestra en el cuadro ___ (fuente el estudio mencionado), en valores
absolutos la población ha aumentado un 32% (de 5.129 MM a 6.830 MM) desde 1990
al 2010 –un 50% sí la medimos desde 1980 a 2010-, con lo cual también
aumentaron un 32% las personas en la informalidad. En general es aceptado que
el desarrollo económico produce mejoras en la formalidad del trabajo, sin
embargo cuestiones como mayor apertura del comercio, reformas comerciales, la
inversión extranjera directa, las distancias hacia los grandes centros de
consumo configuran factores sobre los cuales no se termina de concluir sí son
positivos o negativos para que un país tenga mayor formalidad en el empleo.
Sumemos a este análisis de informalidad laboral, el surgimiento de actividades
directamente ilícitas que se han propiciado en todo el mundo, y que es también
fruto de la crisis del sistema, a tal punto que varios países computan como
parte del PBI el tráfico de drogas y el contrabando, con lo cual consideran a
sus ejecutores como empleados; lo que cabría preguntarse si esto es correcto o
incorrecto, pero no desde el punto de vista metodológico, sino desde el punto
de vista de considerar una sociedad en evolución. Otro punto de conclusión
sobre la informalidad es que varios países comienzan a considerar como
empleados a personas que cobran determinado beneficio social del Estado (lo que
sucede mucho más en países en desarrollo o subdesarrollados), lo que dificulta
la consideración real de sí es desempleado o no, o qué calidad de empleo tiene
esa persona.
Según el informe "Perspectivas
Sociales y del Empleo en el Mundo 2015", que presentó la Organización
Internacional del Trabajo (OIT) pone en evidencia que la inseguridad laboral va
en aumento, tanto en las economías avanzadas como en las emergentes y de bajos
ingresos. El informe considera que “el modelo considerado como estándar -el que
mejor garantiza la protección social- ya no es predominante entre los empleos
que se generan, ni siquiera en los países desarrollados.
Crecimiento de los trabajos de menor cantidad de horas
y aumento de la productividad. Existe una controversia realmente grande en lo
que respecta a la combinación de trabajar menor cantidad de horas. Por un lado,
están los países desarrollados que lograron mayor productividad y permitieron
la baja de horas en algunos sectores sin afectar el salario (aunque ahorrando
costos de estructura en otros sectores); por un segundo lado están algunos
países desarrollados y en desarrollo que por necesidad bajan horas para
disminuir costos, lo que en general termina afectando la calidad del empleo y a
la larga desfavorece la producción y el consumo; en un tercer lugar, están los
países que crean trabajos de menor cantidad de horas porque en su economía,
determinada producción o servicio no genera lo suficiente para ser productiva o
para que se trabaje más horas, estos serían los que se denominan trabajos de
baja calidad; y finalmente, están los países subdesarrollados en donde la
carencia de leyes implica jornadas más largas a menor costo, pero con alta
eficacia en función de la relación precio del trabajo versus cantidad
producida. Bajo estos 4 aspectos se
desenvuelve la percepción de la cantidad de horas trabajadas. Cabe destacar que a lo largo de 4 décadas se
han agrandado las diferencias entre los países desarrollados y los no
desarrollados, y en general, la calidad del trabajo respecto a necesidad de “X”
salario varió, aceptándose en los países desarrollados trabajar menos horas en
función de lograr otro tipo de bienestar o trabajar menos porque se logra mayor
productividad; mientras que en los no desarrollados o se trabaja más por magros
salarios o no se trabaja todo lo que se necesita para alcanzar “X” cantidad de
dinero. Un ejemplo de esto es mencionar
los 10 países con menor jornada laboral en el mundo, basado en un
estudio de Society at Glance,
de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (OCDE):
10. Italia:
La jornada laboral promedio es de 36 horas a la semana, pese a que la jornada
laboral máxima indique 40 horas. El salario promedio de los trabajadores en
Italia es de 2,900 dólares, y cuentan con cuatro semanas de vacaciones al año.
9. Australia:
Quien trabaja en la iniciativa privada tiene jornadas de 36 horas semanales,
sin embargo, los trabajadores públicos laboran 38 horas. El promedio salarial
es de 3,750 dólares al mes.
8. Suecia:
En promedio trabajan 36 horas a la semana, y la media salarial alcanza los
3,200 dólares al mes.
7. Bélgica:
Trabajan un promedio de 35 horas a la semana, el promedio de salario belga
alcanza los 3,700 dólares mensuales.
6. Suiza:
El promedio de horas laborales es de 35, con una media salarial mensual de
4,200 dólares.
5. Alemania:
Tienen un promedio de 35 horas laborales por persona a la semana con un salario
mensual de 4,200 dólares.
4. Irlanda:
Entre 1983 y 2012 el promedio de horas de trabajo por persona en Irlanda pasó
de 44 a 34, con una percepción salarial mensual de 4,300 dólares.
3. Noruega:
De la misma forma que Dinamarca, el promedio de horas laborales a la semana es
de 33, los trabajadores cuentan con un mínimo de 21 días de vacaciones y las
licencias por maternidad llegan a las 43 semanas, con salarios que en promedio
suman los 3,800 dólares.
2. Dinamarca:
En promedio se trabaja 33 horas por semana, su cultura laboral es muy flexible
pues cuentan con seguro de desempleo que puede ser extendido hasta por dos
años. El salario mensual alcanza los 3,800 dólares.
1. Holanda:
Los holandeses tienen un promedio salarial mensual de 3,900 dólares por
personas, la jornada laboral por semana es de 29 horas, con notables beneficios
para las madres trabajadoras, que llegan a tener jornadas laborales de 4 días a
la semana.
Los salarios están expuestos en dólares estadounidenses.
Respecto
de esto, muchos expertos y también hombres de negocios pronostican para el
futuro la disminución de la cantidad de horas trabajadas. Sin embargo, hay
controversias acerca de por qué eso debe suceder. Sí se dará por la mera
evolución de la humanidad, lo que debería ser lo correcto para llevar bienestar
a la mayor cantidad de personas posibles o sí se dará como una opción de
combatir el desempleo creciente pero sumado a menores salarios, en síntesis
mayor cantidad de personas trabajando pero con menores salarios. Como ejemplo
de esto, citaré a Carlos Slim (quien muchas veces ha estado al tope de los más
ricos del mundo según Forbes): El asegura que se
aproxima el tiempo de un cambio profundo en la forma de trabajo, donde las
personas ya no verán sus días de retiro a los 50 o 60 años, sino hasta los 70,
laborando únicamente tres días a la semana y 11 horas por día. Slim cree que
los servicios públicos y particulares deben trabajar las 24 horas, pero las
personas no. No se trata de una simple ocurrencia, ni de una evolución lógica
de las relaciones laborales. Tras esta conclusión está una consideración muy
antigua del trabajo manual como señal de inferioridad que debe ser relegado a
las máquinas, con lo que desaparecerían las clases marginadas, quizá como un
proceso evolutivo de extinción. Todo tiene base en una idea muy simple, si no es posible contratar a
alguien que trabaje jornadas de once horas durante seis días porque se darían las circunstancias de
explotación inhumana, entonces lo
mejor es contratar a dos que trabaje tres días, reduciendo el desempleo
a la mitad, aunque nadie sabe lo que pasará con los salarios, ni con los trabajos dobles. Durante su
ponencia en un reciente foro organizada por el Círculo de Montevideo, Carlos
Slim dijo que no ve otra posibilidad a corto plazo, él concluyó: “No conozco
otra forma de combatir la pobreza en el mundo”. Como vemos, su opinión acerca
de mejorar el mundo, mitigar la pobreza y la creciente desigualdad está basada
en el sistema actual no en la creación de un sistema socio-económico nuevo.
Tecnología
y empleo: a modo de resumen, mencionaré que según muchos expertos la gran
revolución tecnológica que estamos viviendo actualmente es muy probable que sea
totalmente distinta a las revoluciones industriales anteriores que ha sufrido
el mundo. Desde comienzos del S XXI y a medida que mejoran las tecnologías,
cada vez mayor cantidad de gente es relegada de puestos de trabajo. Primero se
requerían menor personal no calificado, ahora la ola está llegando a personal
semicalificado y sectores administrativos; pero también a medida que avance la
inteligencia artificial, la robotización y la automatización los empleos más
calificados serán menos requeridos o podríamos decir que se requerirán, pero
como tendrán menor cantidad de tareas su remuneración será menor. El problema
fundamental reside en que quienes posean el capital para ser los dueños de los
sistemas y los robots en el futuro serán quienes más concentrarán la riqueza en
muchas de las áreas de la economía mundial.
Dicotomía
entre otorgar mayor empleo a los jóvenes y aumentar las edades de retiro de las
personas. Hoy el mundo asiste al aumento de la esperanza de vida y debido a que
los sistemas de retiro de gran parte de los países fueron diseñados 40 años
atrás, se piensa en los ancianos como una carga y para ello también se piensa
en aumentar la edad de retiro; pero también lentamente se convierte en un
problema la tasa de desempleados con edad mayor a 55 años o la precaria forma
en que muchos de ellos se insertan en el mercado laboral. Del otro extremo del
sistema está el crecimiento mundial del desempleo en los jóvenes, que en su
mayor parte duplica el de los adultos, generándose aún mayores problemas en los
países subdesarrollados o en desarrollo por la gran proporción existente de
jóvenes sin capacitación laboral, creándose lentamente la nueva categoría NINI
(ni estudia, ni trabaja).
A modo
de paréntesis quisiera cruzar unas variables, ya que la disminución de
oportunidades en los jóvenes tiene como consecuencia el aumento de la inmersión
de estos en actividades ilegales. Claros ejemplos de esto puede ser lo que sucede
en Argentina, en México o Brasil, por nombrar casos que conozco o sobre los que
he leído, pero que no debe diferir de lo que pasa en otros países.
Aumento
del sector servicios: El sector servicios ha sido durante el Siglo XX el mayor
creador de empleo en el mundo; es evidente y claro que a medida que un país se
desarrolla, los servicios se convierten en un segmento más importante de su
economía; esto es positivo, continuará y hay, cómo mundo, ver la manera de
expandir más la gama de servicios a sectores postergados en muchos países. Las
formas en que se decida avanzar sobre el aumento de los servicios será clave en
el futuro, ya que habrá que conjugar eficiencia, menor cantidad de horas de
trabajo, buenos salarios y creatividad de forma que más y más gente sea
incluida en el mercado laboral.
Capacitación
y especialización: Otro de los grandes aspectos emergentes en la modificación
del trabajo en los últimos 40 años es el requerimiento de cada vez mayor
capacitación y especialización, temas que muchas veces se conjugan con el
aumento de la tecnología. Al ver cada índice de empleo por nivel educativo, se
observa y es lógico que quienes mayor educación y especialización han
conseguido se encuentran con mayores posibilidades de estar empleados. Esto nos
lleva a pensar que todos los países deben hacer un esfuerzo conjunto para que
el acceso a la educación de alto nivel tenga posibilidades para todos los
segmentos económicos. Si bien, existen cientos de miles de ejemplos de ascenso
social a través de la educación, uno de los desafíos futuros es posibilitar la
igualdad de oportunidades educativas. La cuestión aquí pasa nuevamente por
cambios de fondo en el sistema mundial, ya que en la mayor parte del mundo, las
especializaciones y postgrados de una gran cantidad de carreras universitarias
son de alto costo. Sí bien, es probable que no todos quieran seguir la
capacitación postuniversitaria deberían los países ir modelando sus sistemas
educativos para generar postgrados accesibles. De igual manera, hay que
repensar el acceso a la educación de tecnicaturas y especializaciones no
universitarias para aquellos que terminan la educación de secundaria,
bachillerato, high school o como se lo denomine en cada país.
A modo de
conclusión y en pocas líneas, cabría decir que si bien los avances tecnológicos
generan empleo en muchos sectores, son muchos más los sectores en los cuales
estos relegan empleo y comienzan a ser una preocupación para las sociedades;
esto que antes del S. XXI parecía una creencia, los expertos en empleo y tecnología
confirman que repercutirá negativamente en las sociedades del futuro en lo
relacionado con la cantidad de gente empleadas o la calidad de sus empleos.
Asimismo, a medida que el mundo ha avanzado en estos últimos 30 o 40 años, poco
a poco se han ido propagando en las economías las diversas formas de empleos
informales. La cantidad de horas trabajadas es digna de una análisis
tripartito: (i) países desarrollados con menor cantidad de horas y mejoras en
la productividad; (ii) países en desarrollo o subdesarrollados con mayor
cantidad de horas y peores condiciones laborales (respecto de los
desarrollados); (iii) surgimiento de incontables trabajos de menor cantidad de
horas con menores salarios, como forma de dar empleo a mayor cantidad de
personas y/o cómo forma de brindar un servicio o una producción por turnos, con
el fin de mejorar la productividad. El desempleo que afecta a los jóvenes viene
en aumento y hay razones para ligar la falta de oportunidades al surgimiento de
actividades ilegales y al aumento de formas de violencia social. En los países
en desarrollo o subdesarrollado ha surgido una nueva forma de empleo: el empleo
producto de recibir un beneficio estatal o una asistencia social con
obligatoriedad de tareas; esto que si bien es una ayuda necesaria es producto
también de la involución en cuanto a calidad de empleo, siendo una adaptación
negativa a las circunstancias del país o mundiales.
En los
números “duros”, cabría decir, aún no se verifica en el mundo un aumento
sustancial en las tasas de desempleo, aunque sí se verifica en los más jóvenes
un aumento más sostenido. En cambio, sí se verifica en gran parte del mundo una
baja en la calidad del empleo que no es positiva para el desarrollo de las
familias y por ende de las sociedades. A su vez, la humanidad ha entrado en una
fase de aceleración de las nuevas tecnologías que generarán nuevos desafíos,
incluso para los gobernantes, ya que son éstos quien tendrán que ver la forma
de insertar más y más gente “relegada por la tecnología” a nuevas formas de
trabajo. Creo que estamos a tiempo, que la situación en lo que respecta al
empleo no es grave sí vemos el panorama completo, pero se agrava cada lustro
que pasa. Pero, así como mencioné al tratar otros temas (http://nuevaeconomiaycompartir.blogspot.com.ar/2014/09/compartir-la-politica-economica-del.html) que poner en práctica
principios cooperativos en todo el mundo, en toda nación es lo que queda por
hacer y aprender a “Compartir los Recursos” para resolver incontables problemas
que tiene nuestra sociedad mundial, en lo que respecta al empleo las formas que
debería tomar aprender a compartir estarán relacionadas con: (i) trabajar menos
horas con salarios equiparados por actividad en todo el mundo; (ii) repensar
muchos sectores de la economía en donde aceptar nuevos paradigmas tecnológicos
y un cambio en la matriz de generación de energía (http://nuevaeconomiaycompartir.blogspot.com.ar/2014/02/la-necesidad-de-un-nuevo-paradigma_13.html) conllevará una drástica
disminución de la cantidad de empleos existentes, en función de crear un mundo
más sencillo y más amigable con el medioambiente; (iii) idear formas legales
para que los empleados participen en los beneficios sin que los accionistas
vean esto como un efecto negativo en sus finanzas personales, sino como una
forma de altruismo superador para crear una sociedad más evolucionada; (iv)
generar formas de financiamiento e inversión pública y privada (algo de esto se
mencionó en http://nuevaeconomiaycompartir.blogspot.com.ar/2015/12/la-energia-del-dinero-o-mejor-decir-el.html) para crear trabajo genuino en
zonas donde hoy prevalece el desempleo o el empleo de baja calidad, pero al
mismo que sirva para un sistema general mundial basado en compartir (me refiero
a no sólo crear algo para dar trabajo) y ecológicamente beneficioso para el
mundo; (v) que los gobernantes y políticos analicen, proyecten y busquen formas
nuevas de que cada ciudad, cada pueblo se integre al nuevo sistema a crear; (vi)
crear, inventar, financiar la creación de nuevos servicios y mejora de los
existentes; siendo más allá de los relacionados con la tecnología y la
biotecnología, vislumbrados en mi humilde visión, que ser incentivados aquellos
relacionados con el ocio, el turismo, los deportes, las actividades
recreativas, las actividades relacionadas con el diagnóstico médico y la
estética corporal, la mejora del transporte, la creación de ciudades
inteligentes y amigables con el medioambiente; las actividades relacionadas con
temas espirituales; y toda actividad que mejore los términos ecológicos del
planeta; (vii) y, fundamentalmente, sobre lo que más y más hay que pensar es en
generar una ola tan grande de creatividad en todos y cada uno de los ámbitos
que hoy se desenvuelve la humanidad que nos permita evolucionar en paz entre
todos, para todos y con el mundo.
Anexo de Gráficos: